Sima abierta tras una intensa y laboriosa desobstrucción (1 trimestre de 2022). Presenta una boca de 0,6 x 0,5 metros, seguida de un resalte vertical de 5 metros, en cuya base aparece una continuación descendente, que a los pocos metros alcanza una pequeña estancia de 3,6 x 2,5 x 1,1 metros. En este punto, se aprecia el cambio de conglomerado a caliza. También se nota la fuerza del agua cuando el barranco entra en actividad, con las paredes y piedras del suelo muy lavadas, asà como algunos restos de materia orgánica incrustados en alguna grieta. Tras esta estancia, aparece un resalte de 2 metros y otro tramo descendente donde la cavidad se va estrechando. En este punto final, tras una gatera se alcanza la cabecera de un nuevo resalte de tres metros que llega una planta inferior, aunque esta cabecera resulta impenetrable si no se ensancha. Esta cabecera del resalte final se ubica en la cota -11,6 metros, aunque se ha sondeado hasta la cota de -14,6 metros. Se trata de un sumidero temporal, que al desarrollarse en el mismo cauce del barranco, recibirá aportes después de fuertes precipitaciones. |