Se trata de una fractura abierta en dirección 70º NE-250º SW, con recovecos por donde introducirse y con escaso recorrido excepto en el lado más hacia el NE donde humildemento podemos considerar la exploración espeleológica.
Dicha fractura posee los 20 metros de longitud y entre 2 y 3,5 metros de anchura.
Espeleológicamente nos interesa la zona situada más al NE, donde debemos introducirnos en horizontal unos 5 metros con anchuras entre 0,4 y 0,6 metros, alcanzando al final un pequeño boquete de 62 x 40 centÃmetros por el que descendemos unos 2 metros, pudiendo después recorrer penosamente 3 metros hasta hacerse impenetrable.
La otra zona interesante desde el punto de vista espeleológico está situada hacia el SW, teniendo una entrada vertical de 1 x 0,7 metros, de aspecto trapezoidal y que se puede descender cómodamente a través de sus resaltes, poseyendo 2 metros de profundidad hasta una plataforma de 2,35 metros de longitud, seguida de otro corto resalte de 1,5 metros y algún otro recorrido en planta de escasa entidad.
Carece totalmente de reconstrucciones parietales y cenitales. |
